EL LIDERAZGO DE LA NUEVA NORMALIDAD

Este 2020 supone un año de retos para las empresas y la adaptación al cambio es algo que no todas las compañías son capaces de afrontar correctamente.

Trabajar telemáticamente ha sido un gran cambio estructural para las empresas, sobretodo para el departamento de recursos humanos, pero una vez adaptados a este reto, toca el siguiente: la vuelta a la normalidad.

Ahora toca enfrentarse a un desafío casi mayor, volver a trabajar paulatinamente y de forma organizada. Cada empresa ha creado su protocolo de vuelta a la oficina, creando equipos, yendo unos días a la semana y teletrabajando el resto… Además de las medidas de desinfección constante que hay que tomar.

Este reto apela a la responsabilidad de las empresas y de los empleados, de hacer las cosas bien y ser conscientes de que cada acto individual es fundamental para el crecimiento conjunto.

Los cambios a los que nos vamos a enfrentar no son sólo físicos en la oficina, sino también va a afectar a la forma de relacionarnos.

Casi todas las empresas se han visto afectadas económicamente por este virus, por lo que han tenido que rehacer su estrategia de acuerdo con la situación. Por ello hoy en día es fundamental el papel del líder, la toma de decisiones va a ser esencial para continuar con el crecimiento económico de la empresa, hay que adoptar un estilo de liderazgo proactivo y no reactivo, es decir anticiparse a la situación aportando soluciones antes de que el problema llegue y no reaccionar cuando ya haya llegado.

«La innovación es lo que distingue al líder de los seguidores.»

También hay que hacer hincapié en la forma de tratar con los empleados, todos hemos vivido una situación difícil en los últimos meses, por ello ahora actuamos de una forma más solidaria y empática, tenemos un compromiso mayor con la empresa ya que ha apostado por sus empleados por lo que tenemos una responsabilidad mayor, pero sobretodo, actuamos movidos por el humanismo, que fortalece a los equipos haciendo que ahora trabajen más unidos que antes.

Como hemos explicado en el post de líder transaccional a líder transformacional, hay aptitudes de líder que son innatas, pero la mayoría son entrenables, nadie nace siendo un líder auténtico. Por ello es el mejor momento para formar a los líderes de tu empresa en liderazgo, para que descubran cómo afrontar esta nueva situación y aprender a reaccionar proactivamente ante los cambios inesperados.

Descubre nuestra formación en liderazgo para empresas y contribuye en el crecimiento económico de tu empresa en estos tiempos tan difíciles.